En religión, ocultismo y folclore, un demonio (del griego δαίμων daimôn, que se pronuncia démon [ai = e]) es un ser sobrenatural descrito como algo que no es humano y que usualmente resulta malévolo. Sin embargo, la palabra griega original δαίμων es neutral y no contiene una connotación necesariamente negativa en sus inicios para los antiguos griegos. Esto sucedió por la aplicación de la koiné (en el helenístico y en el Nuevo Testamento en griego) del término daimonion (δαιμόνιον)[2] y más tarde se atribuyó ese sentido maléfico a cualquier palabra afín que compartiera la raíz, cuando originalmente fue previsto para denotar simplemente a un «espíritu» o un «ser espiritual».
También se dice que puede referirse a personas con un conocimiento elevado como los filósofos.